Laikacota, un parque que alguna vez fue un orgullo paceño y un destino familiar concurrido, se ha convertido en un escenario desolador, casi de ciencia ficción. La vegetación y el descuido han tomado por completo el lugar, transformándolo en un refugio para personas en situación de calle que consumen alcohol.
“El descuido de la gestión edil hoy se plasma en el parque Laikacota que antaño fue un orgullo paceño y ahora ha quedado reducido a ruinas y convertido en refugio de antisociales. El alcalde se descuidó por completo del cuidado de las áreas verdes y de este parque tan concurrido por todas las familias los fines de semana”, declaró el concejal Javier Escalier luego de la inspección al lugar.
Un patrimonio histórico en ruinas
El parque, ubicado en la cima del cerro Laikacota, considerado un espacio sagrado e importante escenario histórico, languidece en el abandono. Las estructuras que antes servían como juegos infantiles o espacios de esparcimiento, como el anfiteatro, ahora son solo ruinas, algunas incluso utilizadas como baños públicos. Los escombros, principalmente de cemento y fierros oxidados, incrementan la inseguridad en la zona.
A pesar del deterioro, se cobran entradas
Sorprendentemente, a pesar de su estado deplorable, el parque Laikacota aún cobra entrada: Bs 1 para niños y Bs 3,5 para adultos. Además, se generan ingresos por sesiones fotográficas profesionales, con un costo de Bs 125, según la página oficial de Emaverde.
Un deterioro gradual
Los problemas en Laikacota comenzaron en 2005, cuando aparecieron fisuras en varias estructuras. Esto derivó en trabajos de estabilización de una falla geológica que atraviesa el parque, iniciados por el municipio en 2012. Estas obras provocaron el cierre del 55% del lugar.
Con información de Ahora El Pueblo