En el Día del Niño, el ministro de Educación, Omar Veliz, posesionó de manera simbólica a 7.364 defensoras y defensores estudiantiles en las distintas unidades educativas de Bolivia.
El objetivo es que cada representante, elegido mediante un proceso democrático y participativo en los centros educativos, ejerza un rol protagónico de participación activa en los temas concernientes a la protección y cuidado de las niñas, niños y adolescentes estudiantes.
“El trabajo de los defensores estudiantiles es fundamental para asegurar que cada niña y niño pueda ejercer sus derechos en un entorno libre de violencia, discriminación y cualquier forma de maltrato. Los insto a asumir este compromiso con responsabilidad y empatía”, afirmó Veliz.
La defensora y defensor estudiantil son estudiantes que fungen como vigilantes del cumplimiento de los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes al interior de su unidad educativa.
RC/REV